martes, octubre 28, 2014

28 de Octubre de 2014

ABC


ESTEBAN VILLAREJOVILLAREJO / MADRID
Día 28/10/2014 - 03.35h


Cinco militares se adiestran en EE.UU. en el manejo del avión no tripulado Scaneagle

La Armada Española diseña ya su primera unidad de pilotos de aviones no tripulados que, tras haber pasado su certificación en la escuela de Matacán (Salamanca), se adiestra estos días en el estado de Washington en el manejo del Scaneagle, el «drone» de la empresa Insitu -subsidiaria de Boeing- elegido finalmente para realizar misiones de vigilancia, inteligencia y obtención de información desde un buque.

«La nueva unidad dependerá orgánicamente de la Flotilla de Aeronaves como el resto de los medios aéreos de la Armada. Su base se establecerá en la instalaciones de la Armada en Torregorda (San Fernando, Cádiz) compartiendo instalaciones con la Agrupación de Blancos Teledirigidos de la Armada», informan fuentes militares a ABC.

De momento estará formada por un solo equipo -cinco militares se están formando en EE.UU.- pero «en el futuro podrá aumentarse de forma que pueda operar más sistemas». Así, la Armada se introduce de lleno en la nueva tecnología de sistemas de aviación no tripulados que ha revolucionado las misiones militares en el exterior, sobre todo a raíz de la guerra de Afganistán.
Si la 9ª Escuadrilla es de los aviones de combate Harrier del buque «Juan Carlos I», la 10ª de helicópteros SH-60B, la 3ª de helicópteros AB-212, la 5ª de helicópteros SH-3D Sea King, la 6ª de helicópteros Hughes H-500 y la 4ª de las avionetas Cessna Citation, a partir del próximo año la 11ª Escuadrilla será la de aviones no tripulados.

El Scaneagle es un viejo conocido por los militares españoles ya que fue utilizado en Afganistán para misiones de vigilancia e inteligencia, aunque era operado por personal de Insitu.

«Su tamaño y peso son reducidos, por lo que unido a su sencillez en el lanzamiento y recuperación lo hace especialmente útil para su empleo en buques, principalmente en los de pequeño tamaño. Además es adaptable a varios buques o instalaciones en tierra. Sus capacidades permitirán la obtención de información de forma discreta, tanto de día como de noche. Además permitirá reducir el empleo de otros recursos más costosos, como helicópteros o aviones de patrulla marítima y por lo tanto la fatiga y riesgos que genera el empleo de aeronaves tripuladas», explican las mismas fuentes de la Armada.

El objetivo es que la nueva unidad de pilotos pueda estar embarcada en la operación Atalanta en 2015, a bordo del buque de asalto anfibio «Galicia», que desplegará en la misión de la UE contra la piratería en el océano Índico y las costas de Somalia. Otros países europeos como Italia ya utilizan aviones no tripulados en esa misión.

Desde la Armada se subraya que será un «drone» utilizado exclusivamente para operaciones de vigilancia y recogida de información. Sin armamento. Es decir, a través de su potente cámara con visión nocturna y térmica, facilitará imágenes al instante al centro de información y combate del buque.

El sistema adquirido está formado por dos drones Scaneagle y la terminal terrestre de procesamiento de datos. Este «drone» tiene la particularidad de ser lanzado con una catapulta y posteriormete recuperado por un gancho que impacta en una cuerda donde queda retenido.

LA OPINIÓN DE MURCIA


La factoría de La Algameca será la única del grupo que no se beneficiará de la construcción de los buques

28.10.2014 | 04:00

A. T. La plantilla de Navantia en Cartagena teme quedarse sin poder construir por primera vez en mucho tiempo los motores para un nuevo buque de la Armada española. Y es que la Marina planea instalar en sus nuevos Buques de Acción Marítima (BAM) unos equipos de una versión de un motor de cuya licencia no disponen en la empresa de construcción naval española.

El representante de los trabajadores agregó que, al parecer, la Marina española pretende adelantarse a una nueva normativa europea que obliga a reducir las emisiones de CO2 a los barcos civiles, pero que no afecta todavía a buques militares.

Y el problema es que Navantia no tiene la licencia del motor que cumpla los requisitos de esa nueva mortaviva, mientras que en Alemania sí disponen de él, de modo que los motores los harán los germanos en el caso de que la Marina siga adelante con sus planes.

Briones aclaró que aunque los motores que se hacen en Cartagena también son de licencia de esta compañía alemana, aún no disponen en Cartagena de la del nuevo que quiere la Armada, por lo que reclaman a Defensa que espere a instalarlos en los próximos barcos que se construyan.

El presidente del comité de Navantia recordó que el Consejo de Ministros aprobó la construcción de los dos nuevos BAM para dotar de carga de trabajo a las tres factorías españolas, ya que un barco se hará en Ferrol y otro en San Fernando, mientras que los motores se iban a hacer en Cartagena, algo que para los trabajadores está en el aire.

La construcción de los BAM suponía un desembolso 166, 7 millones de euros por cada una de las unidades y, en Cartagena, daría muchas horas de trabajo a la fábrica de motores. La Armada ya cuenta con cuatro buques de este tipo, que van supliendo a las antiguas corbetas.

INTERECONOMÍA


27/10/2014 (10:07)

Ceuta, 27 oct.- El capitán de navío Domingo Gómez-Pamo, al frente del buque de aprovisionamiento de combate (BAC) "Patiño", ha destacado que el despliegue contra la piratería en el Índico ha permitido que no haya "ningún secuestro" desde que ocurrió el caso del pesquero "Alakrana".

En declaraciones a los periodistas en Ceuta, donde se encuentra atracado el buque junto a la fragata "Canarias", Domingo Gómez-Pamo ha valorado el descenso de la piratería en la zona del Índico, ya que "hace prácticamente dos años que no hay ningún secuestro de buques mercantes".

A su juicio, esa situación se produce gracias "al despliegue naval", uno de la Unión Europea y otro de la OTAN, que se desarrolla de forma "compenetrada".Gómez-Pamo ha valorado que a raíz del secuestro del pesquero "Alakrana" se puso en marcha la Operación Atalanta de la UE, en la que participa una unidad de la Armada española, actualmente la fragata "Navarra".El capitán de navío ha resaltado que la puesta en marcha de esta operación ha significado "un descenso" de la piratería hasta el punto de que desde hace dos años que "no se produce ninguno", cuando antes de 2010 se contabilizaron entre 50 y 60 casos.

Tanto la fragata "Canarias" como el buque "Patiño" atracaron ayer en el puerto de Ceuta tras finalizar su participación en el ejercicio de la OTAN "Noble Mariner" contra la piratería y la seguridad en el Mediterráneo.Según ha informado hoy en un comunicado la Base Naval de Rota (Cádiz), después de doce días en la mar, los militares se han adiestrado con otros barcos de 16 marinas aliadas en diversas áreas, tales como las operaciones de seguridad marítima, la lucha contra la piratería, la proyección en tierra de una fuerza anfibia o la detección de submarinos.EFE

EL MUNDO


Un proyecto de conservación está reforestando la montaña pasiega

Diez millones de árboles fueron talados desde el siglo XVI al XVIII para fabricar armamento

Se están recuperando también cuatro razas autóctonas, que ayudan a la reforestación: la vaca roja pasiega, el caballo losino, la oveja lacha y el burro

TERESA GUERRERO San Roque de Riomiera (Cantabria)
Actualizado: 28/10/2014 03:13 horas
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Ascendiendo por la carretera desde San Roque de Riomiera hacia el puerto de montaña Portillo de Lunada, en el municipio de Soba (Cantabria), se encuentra una de las infraestructuras más impresionantes construidas en el siglo XVIII para abastecer a la Armada española. Lo llaman el Resbaladero de Troncos y es una especie de tobogán con un desnivel de 500 metros por el que se deslizaban los árboles talados hasta el río. Su destino eran las Reales Fábricas de Liérganes y La Cavada, donde se producían cañones, piezas de artillería y munición.

A los pies del Resbaladero sigue en pie una cabaña, la Casa del Rey, desde donde se controlaba el proceso de transporte de la madera. En el siglo XVIII se construyeron en esas fábricas casi 3.000 cañones con los que se armaron decenas de navíos, fragatas y galeones. Es un ejemplo de la masiva deforestación que sufrió la montaña pasiega durante los siglos XVI, XVII y XVIII. El balance: 10 millones de árboles talados y 50.000 hectáreas de bosque arrasado.

LOS INCENDIOS PROVOCADOS POR GANADEROS PARA GENERAR PASTOS SIGUEN AMENAZANDO A LA MONTAÑA PASIEGA

Aquel desastre ambiental perpertrado para proveer a la Armada Española está intentando ser corregido dos siglos después a través de la reforestación de los valles pasiegos afectados, que en la actualidad sufren también las malas prácticas ganaderas que siguen llevándose a cabo: un sistema de incendios forestales provocados periódicamente por ganaderos que creen que quemando rastrojos, renuevan los pastos.

Desde que en 1999 la Fundación Naturaleza y Hombre (FNyH) inició este proyecto de reforestación, han plantado con éxito unos 80.000 árboles de especies autóctonas como el haya, el roble, el fresno, el avellano o el abedul. «Es un proceso para el que harán faltan varias generaciones», señala Carlos Sanchez, presidente de FNyH. Según explica, las actuaciones se realizan en la montaña pasiega y oriental de Cantabria (en las cabeceras de los valles del Pas, Miera, Asón y Soba), en el valle de Trueba (Burgos) y en el de Carranza (Vizcaya).

«Queremos que la montaña pasiega recupere el esplendor forestal», afirma Sánchez, que sostiene que «es compatible tener pastos y bosques». Pese a la creencia generalizada, advierte que, además de provocar la pérdida de especies y erosionar el suelo, la quema incontrolada de bosques disminuye la productividad de los pastos.

Juan Carlos García, alcalde de Vega de Pas, explica que en su origen esta práctica era llevada a cabo de forma controlada por varias familias que se unían para quemar pequeñas extensiones, de unos 200 metros, para transformar el bosque en pasto. La quema fue extendiéndose paulatinamente a zonas más bajas de la montaña y los fuegos comenzaron a hacerse sin control. El alcalde critica, no obstante, la forma en la que las autoridades abordaron el problema, prohibiendo completamente estas prácticas y sin contar con la población local: «Hay que repoblar el monte, pero teniendo en cuenta a los que vivimos allí», reclama.

Recuperar razas locales

En la actualidad, la Fundación Banco Santander financia el proyecto Restauración y gestión de bosque atlántico con el que, según destaca su director, Borja Baselga, quieren contribuir «a conservar variedades locales de ganado en peligro».

SE HAN RECUPERADO POBLACIONES DE OVEJA LACHA, BURRO, CABALLO LOSINO Y VACA ROJA PASIEGA, TODAS ELLAS EN PELIGRO

Recuperar razas locales es otro de los ejes de esta iniciativa, que cuenta con cuatro especies autóctonas y emblemáticas de estas tierras como aliadas para reforestar con éxito los bosques. Un rebaño de vacas rojas pasiegas pace en la finca El Recuesto, uno de los terrenos donde se están plantando árboles. Al lado hay varios burros y al cabo de un rato cruza la finca un rebaño de oveja lacha. Son tres de las especies involucradas en el proyecto.

La cuarta es el caballo losino. Todas ellas han ayudado al hombre durante siglos, pero su población ha ido mermándose por diversas causas hasta estar a punto de desaparecer. Así, la vaca roja pasiega, cuya leche es más grasa que la de otras especies y, por tanto, muy apropiada para elaborar sobaos, fue relegada poco a poco por la frisona, que produce más leche. La progresiva mecanización de las labores del campo fue la principal causa que relegó al burro.

Según nos muestra Lorenzo García, guarda de campo de de FNyH, los árboles que plantan están recubiertos por tubos fabricados con un material biodegradable sujetos por varillas. Además de guiar su crecimiento, permiten que los animales puedan comer los rastrojos sin dañar los nuevos árboles.

En la provincia de Burgos visitamos la finca de El Bernacho, en la que hace años que no se provocan incendios y donde se alternan árboles de menos de dos años que apenas llegan al metro de longitud con otros ejemplares plantados cuando comenzó este proyecto. «No metemos maquinaria, el proceso [para plantar los árboles] es manual. Se respeta la regeneración natural porque nuestra filosofía es intervenir lo menos posible», afirma Carlos Sánchez.

También están fomentando la producción ecológica de corderos y terneros, con cuya venta se financian los trabajos de reforestación. Cada año producen un centenar.

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