FARO DE VIGO
Un mallorquín de 68 años, entre los cinco fallecidos en el "Costa Concordia"
Los equipos localizan también el cadáver de un italiano y rescatan a tres supervivientes: una pareja surcoreana y al comisario del buque
AGENCIAS - ROMA Uno de los dos cadáveres rescatados ayer del interior del crucero Costa Concordia pertenece a un español identificado como Guillermo Gual, de 68 años de edad. El otro cuerpo pertenece a un italiano, Giovanni Masia, de 86 años.
Con estas dos personas son ya cinco los fallecidos en el naufragio del crucero, que encalló en la noche del viernes en la isla italiana de Giglio. Los otros tres fallecidos son una pareja de turistas franceses, Francis Serve y Jean-Pierre Micheaud, y un peruano miembro de la tripulación, Thomas Alberto Costiglia.
Los buzos que trabajan en la parte sumergida del buque avistaron a primera hora de la tarde de ayer los dos cuerpos, aún equipados con el chaleco salvavidas, en un punto de reunión para la evacuación en el que quedaron atrapados. Para sacar los cadáveres los rescatadores tuvieron que romper un cristal y cortar las correas de los salvavidas.
Guillermo Gual era uno de los 177 españoles –entre ellos, una decena de gallegos– que participaban en el crucero por el Mediterráneo que naufragó en la isla toscana. Gual formaba parte de un grupo de nueve españoles, casi todos familia, del que perdieron la pista cuando intentaban escapar del crucero. Su desaparición fue denunciada por Vicente Salvador, de 20 años, estudiante de Palma de Mallorca, que viajaba con su novia, sobrina del fallecido, los padres de ella y otros amigos y familiares.
Los trabajos de búsqueda continúan para localizar a las 15 personas aún desaparecidas. Mientras dos japoneses dados por desaparecidos se presentaban en una comisaría de Roma, ayer fueron rescatados con vida una pareja de recién casados surcoreanos y al sobrecargo del buque, Manrico Giampedroni, evacuado en camilla del interior del barco tras haber sido localizado en el puente tres de la nave, después de permanecer atrapado en el barco unas 36 horas.
Este complicado rescate evidenció las dificultades a las que se enfrentan los equipos de salvamento, que además de tener que hacer frente al frío y a la falta de luz en el interior de la nave, necesitan alcanzar la cubierta de babor, desde la que se descuelgan al interior de la estructura. Según la dirección de la región de Toscana, en el interior del barco tan solo trabajan efectivos de los bomberos expertos en espeleología alpino-fluvial.
Mientras, el comandante del barco, Francesco Schettino, de 52 años, detenido el sábado acusado de homicidio culposo múltiple, naufragio y abandono del barco mientras muchos pasajeros aún se encontraban dentro de la nave, sigue encarcelado. Según su abogado, Giulio Leporatti, la Fiscalía de Grosseto rechaza su puesta en libertad alegando que puede huir de Italia.
Según fuentes de la investigación, el comandante abandonó la embarcación hacia las 22.30 horas (GMT) del viernes, cuando aún parte de los pasajeros y de la tripulación esperaban a ser evacuados. Las últimas personas que abandonaron el crucero lo hicieron entre las 02.30 y las 03.00 del sábado. Ciro Ambrosi, primer oficial del puente de mando, también está siendo investigado.
Según el fiscal de Grosseto, Francesco Verusio, el comandante se acercó demasiado a la isla, hizo una maniobra "inexperta" y el casco chocó con un escollo por su parte izquierda. Verusio precisó que el barco estaba a solo 150 metros de la orilla, "una distancia increíblemente cerca". Schettino, por su parte, asegura que las rocas no estaban en los mapas. La caja negra del barco, hallada ayer, está siendo analizada y según Verusio, "ya está hablando" y habría desvelado "una diferencia de una hora entre el impacto, a las 21.45 horas local, y la alarma a la Guardia Costera, dada alrededor de las 22.43 horas local".
Posible "inchino"
Una de las posibilidades que investiga la Fiscalía es el barco estaba realizando una especie de paseo denominado el "inchino" (la reverencia), con todas las luces encendidas y gran refuerzo de sirenas, para saludar a los habitantes de Giglio. La Justicia intenta confirmar si Schettino se acercó tanto al islote para hacer un "inchino".
Un museo marinero en Portonovo
Una dorna y los útiles de trabajo de las redeiras, reclamos de la Casa Mariñeira, ubicada en la casa de Don Fernando
t. medrano - Sanxenxo "Es la primera vez que entro aquí", comentaban un par de jóvenes mientras paseaban por el jardín de la Casa Mariñeira en que se ha convertido, rehabilitación mediante, la popular casa del médico don Fernando del centro de Portonovo. Como ellos, un centenar de nostálgicos vecinos compartían recuerdos sobre el inmueble que ayer, por fin, abría sus puertas.
En esta primera visita, la alcaldesa Catalina González ejerció de guía para la conselleira de Medio Rural e Mar, Rosa Quintana, el presidente de la Diputación, Rafael Louzán, el delegado de la Xunta, José Manuel Cores Tourís, la directora xeral de comercio, Nava Castro, y el presidente del Grupo de Acción Costeira de Pontevedra y patrón mayor de Portonovo, José Antonio Gómez, todos en representación de las administraciones que arrimaron el hombro para que, como reclamaban los vecinos, la casa solariega "volviese al pueblo".
Tras acoger distintos negocios -el dispensario del doctor Lalinde del Río en los años sesenta es el más recordado-, servirá de punto de encuentro para los dos motores económicos del pueblo: la pesca y el turismo, explicó la conselleira. "Es la vieja fórmula de aprovechar nuestro pasado para forjar nuestro futuro". La casa podrá visitarse a partir de mañana (de 17 a 20 horas) y entrará en el circuito de visitas guiadas por el pueblo.
Tras años cerrada a cal y canto, las únicas agujas que quedan dentro son las que sirven a las redeiras para reparar las artes en el puerto. Redes, boyas de cristal y viejos cartelones completan la sala dedicada a las mujeres de la mar, que pronto podrán ampliar sus miras con una tienda.
El contenido de la Casa llegará fundamentalmente de sus protagonistas, las gentes del mar de Portonovo, explican desde el concello, que ya tiene las primeras propuestas para la cesión de material.
Y si para muestra sirve un botón, los Amigos da Dorna les han prestado uno de los mejores, la dorna Bicoca que con su vela desplegada, preside la sala principal. A su alrededor, fotos aéreas y la colección de conchas que un vecino recopiló en el pueblo.
El segundo piso (que se mantiene solo en un módulo) servirá de centro de formación para la que se han recibido peticiones dispares como local de ensayo para la coral o aula para clases de cocina. En las paredes, las fotografías de otro vecino, Ángel Torres, y en el jardín el recordatorio de que aún quedan cosas por hacer: un barco tradicional que espera turno para su rehabilitación,
ARMADA ESPAÑOLA
El Cuartel General celebra el acto de relevo del Suboficial Mayor de la Armada
El suboficial mayor Manuel García ha dedicado más de 40 años de servicio a la Armada
jueves, 12 de enero de 2012
El Almirante Jefe de Estado Mayor de la Armada (AJEMA), almirante general Manuel Rebollo, ha presidido esta mañana, en el Cuartel General de la Armada, el acto de pase a la reserva del Suboficial Mayor de la Armada, Manuel García Delgado, y la toma de posesión de su relevo, el suboficial mayor José Luis Álvarez Ruiz de la Hermosa.
El suboficial mayor Manuel García ingresó en la Armada en 1971, con 16 años, ascendiendo a la escala de suboficiales en 1979. Este extremeño alcanza el empleo de suboficial mayor en enero de 2006 y en julio de 2007 es nombrado para su actual cargo de Suboficial Mayor de la Armada. A partir de mañana pasa a la reserva después de más de cuarenta años de servicio.
En el discurso de despedida, Manuel García, ha manifestado que “la Armada, y soy una prueba de ello, con esfuerzo y amor a ella, te permite alcanzar las metas para las que te prepara”. Posteriormente ha dado las gracias a su mujer y a sus hijas, presentes en el acto, “por comprender mi trabajo” en la Armada y a sus padres por la educación “de espíritu de trabajo” recibida.
Por su parte, el Suboficial Mayor de la Armada entrante, José Luis Álvarez, ingresa como marinero en octubre de 1974 y obtiene el empleo de sargento en 1983. A principios de 2009 asciende a suboficial mayor y a partir de hoy ostenta el cargo de Suboficial Mayor de la Armada.
Creación del cargo
En 2001 se crea el puesto de Suboficial Mayor de la Armada, a propuesta del Almirante Jefe de Personal (ALPER). Su finalidad es informar al AJEMA de forma inmediata sobre inquietudes y sugerencias en temas de personal que afecten a las categorías de Suboficial y Tropa y Marinería.
Por ello, el Suboficial Mayor de la Armada mantiene relación directa con los suboficiales mayores de las unidades de la Armada, para informarse y conocer las inquietudes relacionadas con el bienestar de los suboficiales y militares de tropa y marinería. El objeto final es poder identificar los problemas reales que les afecten de forma general y que, según su criterio, deban obtener una respuesta oficial para su rectificación, por lo que, además, mantendrá una relación muy activa con la Jefatura de Personal.
El cazaminas ‘Turia’ se incorpora a la 2ª Agrupación Naval Permanente de Medidas Contraminas de la OTAN
La misión principal de la SNMCMG-2 es proporcionar a la OTAN una capacidad permanente para efectuar operaciones de medidas contraminas, tanto en época de paz como en períodos de crisis o conflicto
jueves, 12 de enero de 2012
El cazaminas ‘Turia’ ha salido esta mañana a la mar desde su base de Cartagena para integrarse en la Segunda Agrupación Naval Permanente de Medidas Contraminas de la OTAN (Standing NATO Mine Contermesures Group 2, en su sigla, SNMCMG-2).
España aporta regularmente un cazaminas a esta agrupación naval permanente de la OTAN, compuesta por buques destacados por las naciones aliadas que así lo tienen comprometido. El ‘Turia’ estará integrado en dicha flotilla durante el primer cuatrimestre de 2012; a lo largo del año está previsto que lo releven sucesivamente sus gemelos ‘Segura’ y ‘Tambre’.
Durante el período de integración del ‘Turia’, la SNMCMG-2 tiene previsto visitar los puertos del Pireo (Grecia), Souda (Creta, Grecia), Catania (Sicilia, Italia), Túnez, Cagliari (Cerdeña, Italia), Argel (Argelia), Málaga, Casablanca (Marruecos), Lisboa (Portugal), Cádiz, Cartagena, Valencia y Alicante.
La misión principal de la SNMCMG-2 es proporcionar a la OTAN una capacidad permanente para efectuar operaciones de medidas contraminas, tanto en época de paz como en períodos de crisis o conflicto. Los buques de las distintas naciones aliadas integrados en esta flotilla realizan constantes patrullas y ejercicios, en los que practican y perfeccionan los procedimientos navales de la OTAN, lo cual contribuye también a mejorar su adiestramiento y su interoperabilidad. Además, en sus navegaciones y sus visitas a puertos, esta agrupación amplía la presencia naval de la Alianza y contribuye a mejorar las relaciones de ésta con los países ribereños.
El cazaminas ‘Turia’ es la cuarta unidad de la clase ‘Segura’ y cuenta con una dotación de 44 marinos, al mando del capitán de corbeta Javier García de la Fuente.
Un mallorquín de 68 años, entre los cinco fallecidos en el "Costa Concordia"
Los equipos localizan también el cadáver de un italiano y rescatan a tres supervivientes: una pareja surcoreana y al comisario del buque
AGENCIAS - ROMA Uno de los dos cadáveres rescatados ayer del interior del crucero Costa Concordia pertenece a un español identificado como Guillermo Gual, de 68 años de edad. El otro cuerpo pertenece a un italiano, Giovanni Masia, de 86 años.
Con estas dos personas son ya cinco los fallecidos en el naufragio del crucero, que encalló en la noche del viernes en la isla italiana de Giglio. Los otros tres fallecidos son una pareja de turistas franceses, Francis Serve y Jean-Pierre Micheaud, y un peruano miembro de la tripulación, Thomas Alberto Costiglia.
Los buzos que trabajan en la parte sumergida del buque avistaron a primera hora de la tarde de ayer los dos cuerpos, aún equipados con el chaleco salvavidas, en un punto de reunión para la evacuación en el que quedaron atrapados. Para sacar los cadáveres los rescatadores tuvieron que romper un cristal y cortar las correas de los salvavidas.
Guillermo Gual era uno de los 177 españoles –entre ellos, una decena de gallegos– que participaban en el crucero por el Mediterráneo que naufragó en la isla toscana. Gual formaba parte de un grupo de nueve españoles, casi todos familia, del que perdieron la pista cuando intentaban escapar del crucero. Su desaparición fue denunciada por Vicente Salvador, de 20 años, estudiante de Palma de Mallorca, que viajaba con su novia, sobrina del fallecido, los padres de ella y otros amigos y familiares.
Los trabajos de búsqueda continúan para localizar a las 15 personas aún desaparecidas. Mientras dos japoneses dados por desaparecidos se presentaban en una comisaría de Roma, ayer fueron rescatados con vida una pareja de recién casados surcoreanos y al sobrecargo del buque, Manrico Giampedroni, evacuado en camilla del interior del barco tras haber sido localizado en el puente tres de la nave, después de permanecer atrapado en el barco unas 36 horas.
Este complicado rescate evidenció las dificultades a las que se enfrentan los equipos de salvamento, que además de tener que hacer frente al frío y a la falta de luz en el interior de la nave, necesitan alcanzar la cubierta de babor, desde la que se descuelgan al interior de la estructura. Según la dirección de la región de Toscana, en el interior del barco tan solo trabajan efectivos de los bomberos expertos en espeleología alpino-fluvial.
Mientras, el comandante del barco, Francesco Schettino, de 52 años, detenido el sábado acusado de homicidio culposo múltiple, naufragio y abandono del barco mientras muchos pasajeros aún se encontraban dentro de la nave, sigue encarcelado. Según su abogado, Giulio Leporatti, la Fiscalía de Grosseto rechaza su puesta en libertad alegando que puede huir de Italia.
Según fuentes de la investigación, el comandante abandonó la embarcación hacia las 22.30 horas (GMT) del viernes, cuando aún parte de los pasajeros y de la tripulación esperaban a ser evacuados. Las últimas personas que abandonaron el crucero lo hicieron entre las 02.30 y las 03.00 del sábado. Ciro Ambrosi, primer oficial del puente de mando, también está siendo investigado.
Según el fiscal de Grosseto, Francesco Verusio, el comandante se acercó demasiado a la isla, hizo una maniobra "inexperta" y el casco chocó con un escollo por su parte izquierda. Verusio precisó que el barco estaba a solo 150 metros de la orilla, "una distancia increíblemente cerca". Schettino, por su parte, asegura que las rocas no estaban en los mapas. La caja negra del barco, hallada ayer, está siendo analizada y según Verusio, "ya está hablando" y habría desvelado "una diferencia de una hora entre el impacto, a las 21.45 horas local, y la alarma a la Guardia Costera, dada alrededor de las 22.43 horas local".
Posible "inchino"
Una de las posibilidades que investiga la Fiscalía es el barco estaba realizando una especie de paseo denominado el "inchino" (la reverencia), con todas las luces encendidas y gran refuerzo de sirenas, para saludar a los habitantes de Giglio. La Justicia intenta confirmar si Schettino se acercó tanto al islote para hacer un "inchino".
Un museo marinero en Portonovo
Una dorna y los útiles de trabajo de las redeiras, reclamos de la Casa Mariñeira, ubicada en la casa de Don Fernando
t. medrano - Sanxenxo "Es la primera vez que entro aquí", comentaban un par de jóvenes mientras paseaban por el jardín de la Casa Mariñeira en que se ha convertido, rehabilitación mediante, la popular casa del médico don Fernando del centro de Portonovo. Como ellos, un centenar de nostálgicos vecinos compartían recuerdos sobre el inmueble que ayer, por fin, abría sus puertas.
En esta primera visita, la alcaldesa Catalina González ejerció de guía para la conselleira de Medio Rural e Mar, Rosa Quintana, el presidente de la Diputación, Rafael Louzán, el delegado de la Xunta, José Manuel Cores Tourís, la directora xeral de comercio, Nava Castro, y el presidente del Grupo de Acción Costeira de Pontevedra y patrón mayor de Portonovo, José Antonio Gómez, todos en representación de las administraciones que arrimaron el hombro para que, como reclamaban los vecinos, la casa solariega "volviese al pueblo".
Tras acoger distintos negocios -el dispensario del doctor Lalinde del Río en los años sesenta es el más recordado-, servirá de punto de encuentro para los dos motores económicos del pueblo: la pesca y el turismo, explicó la conselleira. "Es la vieja fórmula de aprovechar nuestro pasado para forjar nuestro futuro". La casa podrá visitarse a partir de mañana (de 17 a 20 horas) y entrará en el circuito de visitas guiadas por el pueblo.
Tras años cerrada a cal y canto, las únicas agujas que quedan dentro son las que sirven a las redeiras para reparar las artes en el puerto. Redes, boyas de cristal y viejos cartelones completan la sala dedicada a las mujeres de la mar, que pronto podrán ampliar sus miras con una tienda.
El contenido de la Casa llegará fundamentalmente de sus protagonistas, las gentes del mar de Portonovo, explican desde el concello, que ya tiene las primeras propuestas para la cesión de material.
Y si para muestra sirve un botón, los Amigos da Dorna les han prestado uno de los mejores, la dorna Bicoca que con su vela desplegada, preside la sala principal. A su alrededor, fotos aéreas y la colección de conchas que un vecino recopiló en el pueblo.
El segundo piso (que se mantiene solo en un módulo) servirá de centro de formación para la que se han recibido peticiones dispares como local de ensayo para la coral o aula para clases de cocina. En las paredes, las fotografías de otro vecino, Ángel Torres, y en el jardín el recordatorio de que aún quedan cosas por hacer: un barco tradicional que espera turno para su rehabilitación,
ARMADA ESPAÑOLA
El Cuartel General celebra el acto de relevo del Suboficial Mayor de la Armada
El suboficial mayor Manuel García ha dedicado más de 40 años de servicio a la Armada
jueves, 12 de enero de 2012
El Almirante Jefe de Estado Mayor de la Armada (AJEMA), almirante general Manuel Rebollo, ha presidido esta mañana, en el Cuartel General de la Armada, el acto de pase a la reserva del Suboficial Mayor de la Armada, Manuel García Delgado, y la toma de posesión de su relevo, el suboficial mayor José Luis Álvarez Ruiz de la Hermosa.
El suboficial mayor Manuel García ingresó en la Armada en 1971, con 16 años, ascendiendo a la escala de suboficiales en 1979. Este extremeño alcanza el empleo de suboficial mayor en enero de 2006 y en julio de 2007 es nombrado para su actual cargo de Suboficial Mayor de la Armada. A partir de mañana pasa a la reserva después de más de cuarenta años de servicio.
En el discurso de despedida, Manuel García, ha manifestado que “la Armada, y soy una prueba de ello, con esfuerzo y amor a ella, te permite alcanzar las metas para las que te prepara”. Posteriormente ha dado las gracias a su mujer y a sus hijas, presentes en el acto, “por comprender mi trabajo” en la Armada y a sus padres por la educación “de espíritu de trabajo” recibida.
Por su parte, el Suboficial Mayor de la Armada entrante, José Luis Álvarez, ingresa como marinero en octubre de 1974 y obtiene el empleo de sargento en 1983. A principios de 2009 asciende a suboficial mayor y a partir de hoy ostenta el cargo de Suboficial Mayor de la Armada.
Creación del cargo
En 2001 se crea el puesto de Suboficial Mayor de la Armada, a propuesta del Almirante Jefe de Personal (ALPER). Su finalidad es informar al AJEMA de forma inmediata sobre inquietudes y sugerencias en temas de personal que afecten a las categorías de Suboficial y Tropa y Marinería.
Por ello, el Suboficial Mayor de la Armada mantiene relación directa con los suboficiales mayores de las unidades de la Armada, para informarse y conocer las inquietudes relacionadas con el bienestar de los suboficiales y militares de tropa y marinería. El objeto final es poder identificar los problemas reales que les afecten de forma general y que, según su criterio, deban obtener una respuesta oficial para su rectificación, por lo que, además, mantendrá una relación muy activa con la Jefatura de Personal.
El cazaminas ‘Turia’ se incorpora a la 2ª Agrupación Naval Permanente de Medidas Contraminas de la OTAN
La misión principal de la SNMCMG-2 es proporcionar a la OTAN una capacidad permanente para efectuar operaciones de medidas contraminas, tanto en época de paz como en períodos de crisis o conflicto
jueves, 12 de enero de 2012
El cazaminas ‘Turia’ ha salido esta mañana a la mar desde su base de Cartagena para integrarse en la Segunda Agrupación Naval Permanente de Medidas Contraminas de la OTAN (Standing NATO Mine Contermesures Group 2, en su sigla, SNMCMG-2).
España aporta regularmente un cazaminas a esta agrupación naval permanente de la OTAN, compuesta por buques destacados por las naciones aliadas que así lo tienen comprometido. El ‘Turia’ estará integrado en dicha flotilla durante el primer cuatrimestre de 2012; a lo largo del año está previsto que lo releven sucesivamente sus gemelos ‘Segura’ y ‘Tambre’.
Durante el período de integración del ‘Turia’, la SNMCMG-2 tiene previsto visitar los puertos del Pireo (Grecia), Souda (Creta, Grecia), Catania (Sicilia, Italia), Túnez, Cagliari (Cerdeña, Italia), Argel (Argelia), Málaga, Casablanca (Marruecos), Lisboa (Portugal), Cádiz, Cartagena, Valencia y Alicante.
La misión principal de la SNMCMG-2 es proporcionar a la OTAN una capacidad permanente para efectuar operaciones de medidas contraminas, tanto en época de paz como en períodos de crisis o conflicto. Los buques de las distintas naciones aliadas integrados en esta flotilla realizan constantes patrullas y ejercicios, en los que practican y perfeccionan los procedimientos navales de la OTAN, lo cual contribuye también a mejorar su adiestramiento y su interoperabilidad. Además, en sus navegaciones y sus visitas a puertos, esta agrupación amplía la presencia naval de la Alianza y contribuye a mejorar las relaciones de ésta con los países ribereños.
El cazaminas ‘Turia’ es la cuarta unidad de la clase ‘Segura’ y cuenta con una dotación de 44 marinos, al mando del capitán de corbeta Javier García de la Fuente.
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