miércoles, mayo 23, 2012

El cazador de sueños

Título original: “Dreamcatcher” USA 2003. 136 Min. Género: Terror-Ciencia Ficción. Color. Director: Lawrence Kasdan. Interpretación: Morgan Freeman, Thomas Jane, Jason Lee, Damian Lewis, Timothy Olyphant, Tom Sizemore, Donnie Wahlberg, Jon Kasdan. Mayores de 13 años.

Lo más lógico es que, hablando de Stephen King, tratara de la casi megalítica obra que escribió cuando estaba convaleciente del brutal atropello que sufrió por culpa de un conductor que apartó la mirada de la carretera para reprender a sus perros. Esa novela de los “bichos caca” que, en un inicio, iba a titularse “Cáncer.” Pero no. Voy a reseñar la película realizada en el año 2003 y dirigida Lawrence Kasdan.

El protagonista principal, interpretado por Damian Lewis, -de sobra conocido al haber pasado por la piel de Dick Winters (“Band of brothers”) y de un policía zen (“Life”), lo veo bien el papel de Jonesy, personaje en el que King aporta mucho de sí mismo, de su experiencia previa y hasta de los dolores y padecimientos, ya que ambos saben lo que es ser golpeados por un automóvil, aunque sus consecuencias finales son claramente diferentes.

La historia mezcla el espíritu de “Cuenta conmigo,” un relato que fue llevado a la gran pantalla como “El cuerpo”, y un intento de invasión alienígena al modo clásico. Amistad, recuerdos de infancia, con una pizca de fenómenos paranormales y “greys” dentudos y con muy mala leche.

Como cada año, los personajes cumplen con el ritual de ir a la casa del bosque. Una excusa para unirse de nuevo y revivir sus recuerdos bajo un atrapasueños. Jonesy acude a la cita a pesar de las secuelas de su accidente, en el que murió y volvió a la vida. Fue una suerte que quisiera enfrentarse al frío que le mordía la cadera, ya que los “greys” andan por entre aquellas nevadas montañas y uno de esos “bichos caca” se meterá en su cerebro y se tratará de valerse del humano para infectar la Tierra.

La novela, cuando la leí, la devoré sin descanso. Tiene algo. Luego, cuando tuve la oportunidad de visionar su adaptación, me senté y me quedé mirando la pantalla, aún contando con las reticencias propias y miedos que puedan crear una obra escrita pasada a lo visual.

Hasta, más o menos, la mitad de la película, quizá un poco más, el film sigue, en mi opinión, muy bien la historia original. Es detallista, pero eso habría estado bien si hubiera sido dividida en dos partes de dos horas cada una. La sensación de los poderes que les concedió Duddits, un niño deficiente mental (al menos, en apariencia) a los protagonistas, es perturbadora para aquellos que les rodean y para el espectador.

El problema (como ya he señalado dos párrafos más arriba) es que, de repente, todos se dan cuenta de la hora que es. Nos hemos fundido más de la mitad del metraje… Pues a correr y a poner las fichas como caigan y, claro, pierde muchísimo la producción.

Es una verdadera lástima, la verdad que sí. Pero tampoco debemos desechar el esfuerzo realizado. Es entretenida y el ambiente creado por King  se nota en no poco pasajes.

Leeros el libro de todos modos. Si sois un poco “exquisitos,” os advierto de que de cada diez palabras de diálogos, tres serán palabrotas y es que al amigo King le pasa casi lo mismo que a Reverte: cuanto más viejo, más malhablado. La novela está genialmente enlazada, con flashbacks y vueltas de tuerca, por lo que hay que estar atento.

2 comentarios:

Jose dijo...

Adoro a King. Acabo de releer Buick 8 y hace poco me enteré que George Romero hará la adaptación al cine. Y muy buena crítica Javier.

Un saludo.

Javier dijo...

Ahora estoy yo con los Tommyknockers, muy buena.

Dejé El misterio de Salem's lot, por la simple razón de que es una novela que hay que leerla en la oscuridad y con una única vela y no he tenido muchos ratos de esos. La última vez, casi no fui capaz de apagar la luz cuando me levanté... jejejejeje.

Gracias, Jose :)

Un saludo!