sábado, febrero 29, 2020

Relación de publicaciones de Enero y Febrero de 2020

1898: Cuba

1921: El Rif

Artículos

Colaboraciones con el blog de literatura militar Novilis
—Reseña a «La barbarie organizada», de Fermín Galán http://www.novilis.es/la-barbarie-organizada-fermin-galan/

Reflexiones a la luz de la bitácora (opinión)
—«Ciencia y mujeres». Algunas reflexiones inocentes a razón del Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia https://navengantedelmardepapel.blogspot.com/2020/02/ciencia-y-mujeres.html

Reseñas
—Reseña a la primera temporada de «The Mandalorian» (2019) https://guardiadeimaginaria.blogspot.com/2020/01/guardia-de-television-resena-la-primera.html
—Reseña a la novela «Harry Potter y la piedra filosofal» https://guardiadeimaginaria.blogspot.com/2020/01/guardia-de-literatura-resena-harry.html
—Reseña a la película «El instante más oscuro» (2017) https://guardiadeimaginaria.blogspot.com/2020/01/guardia-de-cine-resena-el-instante-mas.html
—Reseña a la película «La guerra de las galaxias» (1977) https://guardiadeimaginaria.blogspot.com/2020/01/guardia-de-cine-resena-la-guerra-de-las.html
—Reseña al cómic guionizado por Zidrou «El crimen que tú cometiste» https://guardiadeimaginaria.blogspot.com/2020/01/guardia-de-comic-resena-el-crimen-que.html
—Reseña al primer volumen de la mítica serie Blacksad «Un lugar entre las sombras» https://guardiadeimaginaria.blogspot.com/2020/02/guardia-de-comic-resena-blacksad-un.html
—Reseña a la adaptación cinematográfica de la obra de Agatha Christie «Noche sin fin» (1972) https://guardiadeimaginaria.blogspot.com/2020/02/guardia-de-cine-resena-noche-sin-fin.html
—Reseña al integral de «Noche en blanco», de Yann y Neuray https://guardiadeimaginaria.blogspot.com/2020/02/guardia-de-comic-resena-noche-en-blanco.html
—Reseña a la película «Los archivos del Pentágono» (2017) https://guardiadeimaginaria.blogspot.com/2020/02/guardia-de-cine-resena-los-archivos-del.html

martes, febrero 25, 2020

Guardia de cine: reseña a «Los archivos del Pentágono»

Título original: «The Post». 2017. 116 min. EEUU. Drama histórico, Basado en hechos reales. Dirección: Steven Spielgberg. Guión: Liz Hannah, Josh Singer. Reparto: Meryl Streep, Tom Hanks, Bruce Greenwood, Bob Odenkirk, Tracy Letts

El drama periodístico y social queda en un último plano, y lo que copa la narración es la cansina cantinela del “empoderamiento” femenino. La tensión es inexistente; el conflicto, también

Te encuentras por casualidad con el tráiler de este filme en Youtube, descubres quién se esconde tras las cámaras y, recuperado del doloroso fogonazo provocado por la lectura de la cabeza de cartel, compuesta por Meryl Streep y Tom Hanks, entonas un hondo “¡Wow!” Sí, emites, con los labios apretados de pin-up, una exclamación que te deja los pulmones secos. Una cinta que retrata ese año 1971, en el que se filtraron a la prensa los llamados “Papeles del Pentágono”, un macro informe del estado de la impopular guerra de Vietnam que dejaba meridiana la imposibilidad de los EEUU para vencer, así como la obcecación heredada de Administración en Administración desde mediados de la década de 1950 y que estallaría con el inestable Richard Nixon afincado en el poder. El Ejecutivo había manipulado al Pueblo, temeroso de un ridículo internacional al que solo ponía pobre remedio a base de más litros de sangre nueva en el frente. Era como si se repitieran los desastres sufridos por otras potencias con pies de barro, que caían de rodillas en territorios poblados por “salvajes” que iban ganando la partida pasito a pasito con poco más que palos y piedras. EEUU se jugaba mucho si la mentira salía a la luz, más que nada porque la nación podría reaccionar de forma poco meditada. (SIGUE LEYENDO)

Lectura de 25 de Febrero de 2020 a las 1200 horas



  • Barómetro: 768 (Variable) 
  • Termómetro: 12º
  • Higrómetro: 100%

jueves, febrero 20, 2020

Guardia de cómic: reseña a «Noche en blanco», de Yann (guionista) y Neuray (ilustrador)

Título original: «Nuit blanche»
Ediciones Glenat SL, Barcelona, 2009
ISBN: 978-84-8357-975-6
237 páginas
Ésta es la historia, en su prólogo, de dos Rusias que se odian, de dos hermanos en bandos enfrentados durante el torbellino de la guerra civil por las ideas políticas y el amor de una mujer

El hilo argumental se extenderá desde el fusilamiento del zar Nicolás II y su familia en Ekaterimburgo hasta el París de los años 1930, y que girará en torno del capitán blanco Sacha Kalitzin, comandante de una unidad que fracasa en la búsqueda y rescate de la familia real mientras trata de mantener entero su pellejo ante el general Gaida y los últimos rescoldos de un Estado devorado por la revolución bolchevique. Kalitzin vivirá una larga serie de incidentes mientras los aliados de los zaristas racanean su apoyo y corren hasta Vladivostok para disfrutar de los placeres de cabaret.

La sensación de peligro será constante, incluso para Nadia Pleviskaya, “El ruiseñor del Kursk”, una mujer que baila sus lealtades entre Sacha y su hermano Igor, entre el zarismo y el bolchevismo, hasta que las brutalidad de la cheka le convenza de cuál es el mejor camino para sobrevivir (SEGUIR LEYENDO)

Lectura de 20 de Febrero de 2020 a las 1200 horas



  • Barómetro: 769,5 (Variable) 
  • Termómetro: 12º
  • Higrómetro: 81%

miércoles, febrero 19, 2020

Osas en los cielos

Las Osas mayor y menor, ésta última con la estrella polar o Polaris, son dos de las constelaciones que siempre han acompañado a la Humanidad (junto a Orión) y de las pocas que se molestan en enseñarnos en la Básica. Quizá se nos quedan grabadas en la mente más que nada porque son como carros tirados por tres caballos y nos hace gracia la comparación, no llegando a ver las osas como tales ni por asomo.

Por cuestiones de la mitología helena, sendas constelaciones recibieron estos nombres gracias a una génesis muy similar, interviniendo siempre el pillín de Zeus (Júpiter), en una de sus correrías y tocándole las narices, ésta vez, a su hija Artemisa (Diana). En “origen”, la Osa mayor era una hija del rey Licaón de Arcadia y compañera de Artemisa, sobre la que el gobernante del Olimpo desplegó su encanto sobrenatural y preñó. Siendo que su estado era difícil de ocultar, la diosa de la caza terminó dándose cuenta y, enrabietada, convirtió a la infeliz seducida en una osa. Aún como fiera, dio a luz a Arcadio y ambos fueron capturados por cazadores y entregados como obsequio al Licaón.

La osa, durante su cautiverio, se atrevió a penetrar en los suelos sagrados de un templo dedicado a Zeus, lo cual se entendió como una grave falta, por lo que los habitantes de Arcadia, con Arcadio entre ellos, persiguieron a la plantígrado para darle muerte. Zeus, por cosas del remordimiento, intervino a tiempo y elevó a la presa al firmamento.

Esta constelación cuenta con siete estrellas principales: Benetnasch, Mizar, Alioth (la más brillante), Megrez, Pechda, Dubhe y Merak.



De la Osa menor, la Mitología ha “guardado” el nombre de la posible afortunada, aunque hay muchas versiones al respecto: para unos es Fenicia, una joven protegida por Artemisa y que cayó en la misma trampa que la anterior: Zeus la posee y Artemis, vengativa, la convierte en una osa, pero, luego la misma diosa recapacita y la perdona, le devuelve su forma humana y la eleva a los cielos. Para otros es Cinosura, ninfa del monte Ida, o Hélice, ambas nodrizas de Zeus.

La Osa menor es mucho más visible que la mayor, más que nada gracias a Polaris, fija en el Norte y vital para la navegación, y la primera de sus principales, junto a Pherkad y Kochab.



Lectura de 19 de Febrero de 2020 a las 1200 horas



  • Barómetro: 774,5 (Buen tiempo) 
  • Termómetro: 10º
  • Higrómetro: 81%

martes, febrero 18, 2020

Guardia de cine: reseña a «Molly’s Game»

Título original: «Molly’s Game». 2017. 141 min. EEUU. Biopic, Basado en hechos reales. Dirección: Aaron Sorkin. Guión: Aaron Sorkin (basándose en la autobiografía de Molly Bloom). Reparto: Jessica Chastain, Idris Elba, Kevin Costner, Michael Cera, Samantha Isler

La adaptación a la Gran Pantalla de la autobiografía de Molly Bloom, una esquiadora olímpica que acabó convirtiéndose en la organizadora de partidas de póquer más exclusivas y decadentes de los Estados Unidos, toma el pulso al espectador, sorprendido al comprobar con qué rapidez transcurre su metraje

El apasionamiento en los diálogos y una narrativa prácticamente idéntica a la empleada en «Barry Seal», con retazos sueltos de un presente al que vamos enlazando mayores tramos de pasado, apoyados en un lenguaje directo, es lo más destacable de una película muy bien dotada a nivel interpretativo. Jessica Chastain brilla, una vez más; resulta estúpido reiterarse, pues solo la he visto flojear en una ocasión que no merece la pena ser tenida en cuenta («La casa de la esperanza»). Y Chastain cuenta con una réplica a la altura con Idris Elba, un actor de fuerte presencia y carácter, que se desenvuelve, de forma formidable, durante la reunión informal con la Fiscalía (SEGUIR LEYENDO)

lunes, febrero 17, 2020

Resultado sorteo 1898: Cuba

Ciencia y mujeres


El 11 de febrero, cosas de estos mundos y lares tan ociosos, es designado como el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia. Ahí, con mayúsculas cuando aquí hasta nos las hemos quitado.

Durante ese día (existe un día para todo y otros 364 para pasar del asunto), organismos públicos y de todo pelaje espolean a la población femenina para que se abrace a la Física y la Química con ardor guerrero y sacramental, pretendiendo ejercer de buenos Pigmaliones. Dichos entes subrayan que “la comunidad internacional ha hecho un gran esfuerzo para inspirar y promover la participación de las mujeres y las niñas en la ciencia; sin embargo, las mujeres siguen encontrando obstáculos para desenvolverse en el campo de la ciencia”. A lo que añaden que “En la actualidad, menos del 30 por ciento de los investigadores en todo el mundo son mujeres” y que “Los prejuicios y los estereotipos de género que se arrastran desde hace mucho tiempo continúan manteniendo a las niñas y mujeres alejadas de los sectores relacionados con la ciencia”.

¡Vaaale!

Yo he sido uno entre los millones que hemos sufrido las acometidas del Pigmalión hijo de la grandísima puta (en términos correctos y psicológicos: Efecto Pigmalión negativo o Efecto Golem). De ese que te espeta, machacón, que tooooodo lo que haces, dices, piensas y cagas está mal. Luego, en retrospectiva, te das cuenta que quien te estaba (y sigue) poniendo palos en las ruedas era (es) más inútil que un cenicero en una moto, pero el daño está hecho. Prejuicios y estereotipos basados en tu procedencia, aspecto físico, capacidad de aprendizaje, soltura, etc.

No se puede negar la existencia de trabas a las mujeres en muchos campos, y no pocas en bocas y manos de otras mujeres; trabas no de formación en los países modernos, sino laborales

De mis cada vez más alejados días universitarios (permitidme la nostalgia), me quedan recuerdos de cuando nos trasladaron (a saber porqué) a un aula del Ala “de Ingenierías”. Nos tendríais que ver ahí, como pipiolos dándole mal al Derecho y arramblando en una cafetería que “no era la nuestra”. En mi promoción había una proporción de 1 hombre/10 mujeres (ni en una fantasía pornográfica, oiga), por lo que, gracias a nuestra pequeña invasión, el vecindario masculino de aquel subterráneo mundo sufrió una sacudida digna de pasar a los anales, pues hablamos de que, hasta entonces, se contabilizaría una ratio de 20 hombres/1 mujer.

Aquello era como estar en una Comic Con permanente y sin gracia.

Sin embargo, en la misma universidad se daban supuestos (en las filologías y otras –logías) en los que este extraño orden cósmico se invertía, donde cabían situaciones de 1 hombre/20 mujeres, dejando el ejemplo de nuestra clase en una simple nota anecdótica sin importancia.

Y esto no sucedía porque las niñas tengan vetado el campo científico. Quizá sea por cuestiones personales y de la propia capacidad de cada cual en una materia. Quizá la capacidad analítica y aséptica sea más común en hombres y la abstractiva en mujeres; qué se yo

Me parecen muy tontas, pueriles e insustanciales estas jornadas con las que los más marisabidillos del lugar te dicen (Pigmaliones también), lo que las niñas y mujeres tienen que hacer y lo que no tienen que hacer y ser. Estoy un poco harto de estas chorradas, quizá por mi propia condición, pues yo no valoro a los individuos en concreto, de forma individual, por su cromosoma XX o XY, por con quién se satisfacen de cintura para abajo, por el símbolo político que adorna el papel higiénico con el votan y demás; sino por lo que hacen y son, por lo que aportan.

Con esto de la “igualdad” de género nos están metiendo no pocos goles, ya desde la cuna. Y yo me pregunto: ¿por qué no nos dejan en paz unos y otros? Si mi hija (hipotética para el que no se ha multiplicado sobre la Tierra) quiere jugar a reparar y crear coches vestida de princesa, que lo haga, yo no le voy a decir absolutamente nada; yo no le voy a imponer colores y carreras de futuro. Que haga lo que le gusta y lo que mejor se le dé. 

Dar continuidad a las líneas que van trazando organismos de indiscutible aliento político supone un peligro notorio. Quizá cumplamos las más delirantes pesadillas de muchos escritores del género distópico y los sueños húmedos de los dictadores en crianza, con poblaciones globales segmentadas y numeradas, con una identidad y un futuro dictado por el Estado protector: fulanito de tal, nacido en tal, le gustará el voleibol, será funcionario y tendrá derecho a procrear tres hijos como máximo; fulanita de tal, nacida en tal, le gustarán los conejitos, será bioquímica…

Yo creo que en vez de animar (forzar) a que las niñas escojan las Ciencias como objeto de estudio y futura vida laboral, hacerlas a “su imagen y semejanza”, deberían dejarlas curiosear, como deberían dejar a todos, y al que le interese la cosa, que la siga, y al que no, que continúe con la búsqueda.

Lectura de 17 de Febrero de 2020 a las 1200 horas



  • Barómetro: 772 (Buen tiempo) 
  • Termómetro: 11º
  • Higrómetro: 76%

jueves, febrero 13, 2020

Guardia de cine: reseña a «Noche sin fin»

Título original: «Endless NIght». 1972. 95 min. RU. Suspense. Dirección: Sidney Gilliat. Guión: Sidney Gilliat (basándose en la obra de Agatha Christie). Reparto: Hayley Mills, Hywells Bennet, Britt Ekland, George Sanders, Lois Maxwell

Película que no defrauda, pues siempre ocurre algo sospechoso y que no se termina de cerrar hasta a falta de diez minutos para los títulos de credito

Los hay que, cuando les suena en los oídos el nombre de Agatha Christie, se forman la imagen de una señora que se dedicaba a garabatear y publicar graciosos y simples juegos de “atrapa al asesino” como diversión propia y ajena. Y es que, para el común de los mortales, el género de investigación policíaca y de literatura negra es algo menor, un simple entretenimiento hecho de forma rápida, sin conciencia ni fortuna; aún cuando a todos nos gusta un buen asesinato, sobre todo si muere un personaje que nos resulte del todo odioso (SIGUE LEYENDO)

Lectura de 13 de Febrero de 2020 a las 1200 horas



  • Barómetro: 767 (Variable) 
  • Termómetro: 13º
  • Higrómetro: 100%

martes, febrero 11, 2020

Guardia de cómic: reseña a «Blacksad. Un lugar entre las sombras», de Juan Díaz Canales (guionista) y Juanjo Guarnido (ilustrador)

Título original: «Quelque part entre les ombres»
NORMA EDITORIAL, Barcelona
Colección: Cómic europeo
Serie: Blacksad
ISBN: 978-84-8431-245-1
48 páginas
Un franco homenaje al género Noir pergeñado desde el fondo de las viñetas, que presenta una línea de historias adultas y merecidamente premiadas

John H. Blacksad es el personaje de cómic parido por un español con más proyección y éxito en su exportación, pero que tal afirmación, fiel a la realidad, no os lleve a equívoco, pues se publicó entre los pliegues cálidos y confortables del una editorial como la francesa Dargaud, cuyos representantes pusieron los francos y apostaron por esta curiosa mezcla entre Disney y el género Noir de detectives que resuelven crímenes  pateándose los bajos fondos de la ciudad.

Haciendo extensiva la advertencia anterior, que no os trastoque el gesto la sola mención de Disney, pues no va más allá de la cooperación del dibujante con dicha compañía (haciendo un curioso homenaje a la productora, sobre todo cuando el protagonista felino se camela a una ratita) y de que los personajes son animales antropomórficos (cosa no exclusiva de Walt y amigos), cuyos rasgos salvajes nos permiten identificar sus impulsos y personalidades. (SEGUIR LEYENDO)