jueves, noviembre 17, 2011

17 de Noviembre de 2011

LA VOZ DE GALICIA

La Universidad viguesa guía una misión de perforación oceánica

Científicos de los cinco continentes comprobarán el cambio climático

l. c. saavedra
vigo /la voz
17/11/2011

Un grupo de 34 científicos pertenecientes a 12 países de cinco continentes prevé iniciar este sábado desde las islas Azores una travesía de casi dos meses a bordo de un buque perforador norteamericano, con el objetivo de realizar sucesivas catas del subsuelo oceánico -en la zona en la que más se acusa la convergencia de las placas tectónicas africana y europea- para conocer las modificaciones del clima en una escala que abarca los últimos seis millones de años. El cojefe de la misión, que lleva preparándose ocho años, es el investigador y profesor titular del departamento de Geociencias Marinas de la Universidade de Vigo, Francisco Javier Hernández-Molina.

La expedición tratará de conocer por medio de estas perforaciones -que se harán siguiendo el trazado de la gran dorsal submarina que enlaza el océano Atlántico y el Mediterráneo, hasta llegar al estrecho de Gibraltar- cómo los grandes trasvases de agua entre ambas masas saladas afectan al clima actual y a sus posibles variaciones. Hubo un tiempo remoto en el que el Mediterráneo se secó por completo al unirse África y Europa, cuando desapareció el propio estrecho de Gibraltar, algo que quizá sucedió hace unos seis millones de años.

Desde que los continentes volvieron a separarse, según las investigaciones realizadas, el Mediterráneo envía a gran velocidad y con un enorme caudal una incesante corriente submarina que fluye a diferentes profundidades hacia el Atlántico. Este flujo ha ido realizando erosiones gigantescas y prolongadas en el suelo marino y las paredes de los continentes, donde han quedado las huellas, precisamente, de esos cambios en el clima. Esas acumulaciones de sedimentos, fango y arena, arrastrados durante miles de años por las corrientes en sentido este-oeste, han podido generar, según los científicos, «nuevos hábitats marinos y zonas susceptibles de convertirse en reservorios de petróleo y de gas».

Los investigadores prevén zarpar este sábado, día 19, desde las Azores en el buque perforador norteamericano Joides Resolution, el mayor del mundo en su clase, con 145 metros de eslora y una altura de 62,5 metros incluyendo la torre de perforación. Se prevé que las taladradoras lleguen hasta 1.500 metros de profundidad bajo el lecho marino, una distancia considerable para extraer datos de la composición de lo que hay más allá de la corteza submarina. Con todo, muchas extracciones de petróleo se hacen ya a profundidades superiores. En total, la misión mueve en el buque a 111 personas. Se prevé que culmine el próximo 17 de enero en el puerto de Lisboa.

Un gigante silencioso

A pesar de las gigantescas dimensiones de esta nave perforadora, con 145 metros de eslora y 62,5 de altura, sus doce motores laterales le permiten permanecer suavemente inmóvil sobre los objetivos que se han marcado los científicos.

ARMADA ESPAÑOLA

El patrullero de la Armada 'Infanta Cristina' ayuda a liberar un pesquero secuestrado por piratas

Cuando el buque español se acercó a la embarcación, los presuntos piratas lanzaron las armas al mar y fueron reducidos por la dotación del pesquero

jueves, 17 de noviembre de 2011


El patrullero de la Armada Española 'Infanta Cristina', desplegado en la operación Atalanta de la Unión Europea contra la piratería en el océano Índico, ha participado en la liberación de un pesquero tipo 'dhow' que había sido secuestrado por un grupo de piratas.

El buque español recibió la orden del comandante de la Fuerza Naval de la operación Atalanta de proceder a investigar un pesquero que podría estar secuestrado por piratas y que había sido utilizado en acciones de piratería.

Una vez localizado, el capitán del pesquero comunicó que se encontraban bajo el control de un grupo de piratas. El P-77 ‘Infanta Cristina’ procedió a reducir distancias y preparó su equipo de infantería de marina para una intervención. En esos momentos, los presuntos piratas lanzaron sus armas al mar y los tripulantes del pesquero aprovecharon la ocasión para reducirles.

El capitán del pesquero, de nombre 'Al Talal', con bandera de Islas Comores y una tripulación integrada por 21 pakistaníes, informó de que habían sido secuestrados hace 12 días por nueve piratas a bordo de dos esquifes.

Tras ser asistido por el buque español con víveres, agua y combustible, el ‘Al Talal’ ha puesto rumbo a Omán, mientras que el 'Infanta Cristina' --siguiendo instrucciones del comandante de la Fuerza Naval de la operación Atalanta—traslada a los presuntos piratas hasta la costa de Somalia, ya que el capitán del pesquero ha renunciado a ejercitar acciones legales contra ellos.

Estos presuntos piratas podrían pertenecer al Grupo de Acción Pirata (PAG, en inglés) que operaba desde hace semanas al sureste de la costa de Omán, y que se sospecha es responsable de cuatro ataques fallidos contra el tráfico mercante en la zona.

El patrullero ‘Infanta Cristina’, que por segunda vez participa en la misión aeronaval de la Unión Europea, permanecerá en las aguas del Índico hasta diciembre, en el periodo entre monzones, que es el de mayor riesgo de ataques.

Junto al ‘Infanta Cristina’, también se encuentra desplegado en la zona el buque de asalto anfibio ‘Galicia’ . El patrullero ‘Infanta Cristina’ cuenta con una gran experiencia en misiones internacionales, como la operación de la OTAN en el Mediterráneo ‘Active Endeavour’ de contraterrorismo y la operación de Naciones Unidas UNIFIL en Líbano, integrado en la Fuerza Marítima Europea (EUROMARFOR).

Con base en Cartagena, se encuadra en la Fuerza de Acción Marítima de la Armada. Sus principales misiones incluyen la vigilancia y protección de los intereses marítimos nacionales, el apoyo a nuestra flota pesquera en los caladeros donde faena, la colaboración con otros organismos del Estado en funciones de salvamento marítimo, la detección y seguimiento de posibles actividades de inmigración ilegal y la colaboración con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en la lucha contra el narcotráfico y el terrorismo.

Su dotación está compuesta por un total de 102 personas, pertenecientes a la propia dotación del buque y a la fuerza de protección de Infantería de Marina. Todos ellos están bajo el mando del capitán de corbeta Ángel Gamboa Pérez-Pardo.


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