Hace tan solo unos días recibí un amable correo electrónico de parte de Sabino Laucirica, plentziatarra, excapitán de la Marino mercante y erudito historiador quien me hacía saber de su última obra «Las columnas del Imperio. (Cuando los vascos conquistaron el mundo para la corona española)» (Ediciones Beta III Milenio), donde dedica 360 páginas a desentrañar la vinculación vasca en la forja del Imperio español, entre 1492 y 1805, para llegar incluso a la batalla del cabo Machichaco, durante la guerra civil 1936-39.
Y como viene siendo costumbre en estas cubiertas, gustosos nos hacemos eco de esta reciente publicación, siendo que os ofrecemos, a continuación, una completísima sinopsis a cargo de su autor.
SINOPSIS
«Las columnas del imperio» es la crónica de un viaje de más de tres siglos por los paisajes de un imperio donde nunca se ponía el sol. El pueblo vasco no ha sido un pueblo aferrado a su tierra y a sus costumbres sino que se lanzó a la conquista de un mundo desconocido. En este viaje estaremos al lado de muchos de sus protagonistas.
La reconquista ha terminado en Granada, llevaremos al último rey nazarí Boabdil el Chico de vuelta a Cazaza (Reino de Fez) en el buque del corsario de Lekeitio Iñigo de Artieta, descubriremos poco después el Nuevo Mundo de la mano de Juan de la Cosa “vizcaíno” navegante y armador de la nao Santa María, escucharemos las palabras de Fray Bartolomé de las Casas “los indios tenían reciente memoria de haber llegado a esta isla Española otros hombres blancos y barbados como nosotros, antes que nosotros no muchos años”.
Pocos años después de la mano de Pascual de Andagoya asistiremos a la fundación de la ciudad de Panamá y veremos por primera vez el Océano Pacífico en los ojos de Vasco Núñez de Balboa, asistiremos al milagro de la Virgen de Guadalupe junto al obispo de México, Fray Juan de Zumárraga, declararemos la independencia de las tierras del Orinoco junto a Lope de Aguirre, tres siglos antes que Simón Bolivar.
Veremos cómo es arrojado al mar el cadáver de Juan Sebastián Elcano víctima del escorbuto y luego navegaremos con Andrés de Urdaneta tratando de buscar la ruta del tornaviaje, asistiremos a la fundación de las ciudades de Cebú y Manila junto al Adelantado, Miguel López de Legazpi.
Veremos la solemnidad de la fundación de las ciudades de Santa Fe y Buenos Aires junto a Juan de Garay y combatiremos junto a Bruno Mauricio de Zabala contra los portugueses para recuperar la orilla izquierda del Río de la Plata y una vez conseguido fundaremos Montevideo.
Asistiremos al continuo peregrinar de Yñigo de Loyola en busca de su fe perdida y en la formación del Ejercito de Dios, que tanta ayuda prestará a los indígenas del Nuevo Mundo.
Navegaremos una y otra vez y hasta diecisiete veces desde La Habana a Sevilla en la nave Capitana de la Carrera de Indias al mando del almirante Tomás de Larráspuru, asistiremos a la conquista de México al lado de Juan de Oñate y avanzaremos al norte del Río Grande junto a su hijo Cristóbal y más tarde fundaremos el Reino de la Nueva Vizcaya junto a Francisco de Ibarra. Ya de vuelta asistiremos a la audiencia que da el Papa Urbano VIII a Catalina de Erauso, la monja alférez.
Nuestra gran vocación marinera nos hará embarcar sin ningún temor en el puerto de Pasajes a bordo de la nao San Juan y estaremos al lado de nuestros balleneros en la conquista de Terranova y a bordo de la chalupa de Gannis de Sale perseguiremos al terrible monstruo que emerge del fondo marino amenazante, pero es el sustento de nuestros hijos y no cejaremos hasta vencerle. Más tarde defenderemos Placentia de los ataques ingleses a bordo del “Envieux” la fragata de Joannes de Suigaraichipi, “el corsario de Bayona”. De regreso iremos a bordo del galeón Santa Ana de la escuadra de Vizcaya al mando del almirante Juan Martínez de Recalde a la conquista de Inglaterra y regresando maltrechos a La Coruña viajaremos para defender Cartagena de Indias contra la mayor flota que se ha visto nunca, la inglesa del almirante Vernon, pero lucharemos junto a Blas de Lezo en el castillo de San Felipe y haremos desistir a los ingleses.
De vuelta a Cádiz, asistiremos impávidos y llorosos a la muerte del Brigadier Cosme Damián Churruca en aguas de la Bahía de Cádiz, ya se lo ha adelantado por carta a su hermano “si llegas a saber que mi navío ha sido hecho prisionero di que yo he muerto”. La premonición se ha cumplido. Más tarde asistiremos a la cena en Waterloo entre el Duque de Wellington y el General Álava, en una cálida pero lluviosa noche del mes de julio de 1815. Es la víspera de la batalla definitiva.
El camino está llegando a su fin, ha sido un largo viaje y el imperio agoniza víctima de la falta de recursos para mantenerlo y de las nuevas ideas liberalizadoras recogidas por la Constitución de Cádiz de 1812. Sólo queda certificar su defunción y para ello se envía nuevamente a otro vasco Juan Ruiz de Apodaca, que será el último Virrey de la Nueva España, pronto vendrá el libertador de los pueblos indígenas Simón Bolívar, nacido en Caracas, pero que es la quinta generación de Simón Bolívar “el viejo” emigrante de los verdes y húmedos valles de Vizcaya. Jamás pensó que iba a ser un descendiente suyo quien construyera las nuevas naciones americanas. Asistiremos a la toma de posesión de George Washington, presidente de la primera nación americana, junto al embajador español, el bilbaíno Diego de Gardoqui y Arriquíbar.
Y finalmente estaremos junto a Rafael Menchaca en la Batalla de Machichaco, asistiendo a bordo del bou Bizcaya al desigual combate contra el crucero Canarias.
Ha sido un largo viaje a través de un imperio, que comenzó ilusionante de la mano de una reina buena, Isabel de Castilla y que termina bajo el mandato de un rey incapaz, Fernando VII. Pero su final era imparable, las distancias son enormes, la pólvora ya escasea y las ideas difícilmente se combaten con las armas. Los días del imperio español habían acabado y también el de los héroes vascos que ayudaron a construirlo. El divorcio surgido en los últimos tiempos entre los vascos y la corona española perdura hasta nuestros días.
INDICE DE CAPITULOS
PROLOGO
CAPITULO I : LA CONQUISTA DEL NUEVO MUNDO
JUAN DE LA COSA (EL VIZCAINO)
IÑIGO DE ARTIETA (EL CORSARIO DE LEKEITIO)
PASCUAL DE ANDAGOYA (FUNDADOR DE PANAMA)
FRAY JUAN DE ZUMARRAGA (PRIMER OBISPO DE MEXICO)
LOPE DE AGURRRE (EN BUSCA DE EL DORADO)
JUAN ORTIZ DE ZARATE (GOBERNADOR DE PARAGUAY Y RIO DE LA PLATA)
JUAN DE GARAY (FUNDADOR DE SANTA FE Y BUENOS AIRES)
CRISTOBAL DE OÑATE (FUNDADOR DE ZACATECAS Y GUADALAJARA)
FRANCISCO DE IBARRA ( FUNDADOR DEL REINO DE NUEVA VIZCAYA)
JUAN DE OÑATE (CONQUISTADOR DE NUEVO MEXICO)
CATALINA DE ERAUSO (LA MONJA ALFEREZ)
BRUNO MAURICIO DE ZABALA (FUNDADOR DE MONTEVIDEO)
BRUNO DE HECETA (MARINO Y CARTOGRAFO DEL PACIFICO NORTE)
IGNACIO DE LOYOLA (EL CONQUISTADOR DE ALMAS)
TOMAS DE LARRASPURU (EL ALMIRANTE DE LA CARRERA DE INDIAS)
CAPITULO II : LA CONQUISTA DE LAS TIERRAS DE ORIENTE
JUAN SEBASTIAN DE ELCANO (EL CIRCUNNAVEGANTE)
ANDRES DE URDANETA (EL NAVEGANTE AGUSTINO)
MIGUEL LOPEZ DE LEGAZPI (EL ADELANTADO DE LAS FILIPINAS)
CAPITULO III : LA CONQUISTA DE TERRANOVA
LA LLEGADA DE LOS PRIMEROS VASCOS
JOANNES DE SUIGARAICHIPI (EL CORSARIO DE BAYONA)
EL FINAL DE LAS PESQUERIAS
CAPITULO IV : LA CONQUISTA DE INGLATERRA
MARTIN DE BERTENDONA (ALMIRANTE DE LA ESCUADRA DE LEVANTE)
JUAN MARTINEZ RECALDE (ALMIRANTE DE LA ESCUADRA DE BIZKAIA)
MIGUEL DE OQUENDO (ALMIRANTE DE LA ESCUADRA DE GIPUZKOA)
CAPITULO V : LOS HEROES VASCOS EN LAS BATALLAS NAVALES
BLAS DE LEZO (EL HEROE DE CARTAGENA DE INDIAS)
COSME DAMIAN CHURRUCA (EL HEROE DE TRAFALGAR)
MIGUEL DE ALAVA Y ESQUIVEL ( EL HEROE DE TRES BATALLAS)
CAPITULO VI : EL FIN DE UN IMPERIO, EL FUERO VASCO Y LA GUERRA
JUAN JOSE RUIZ DE APODACA Y ELIZA (EL ULTIMO VIRREY DE MEXICO)
SIMON BOLIVAR (EL LIBERTADOR)
DIEGO DE GARDOQUI Y ARRIQUIBAR (PRIMER EMBAJADOR EN EE.UU.)
RAFAEL MENCHACA UGALDE (LA BATALLA DE MACHICHACO)
DESDE EL ARBOL MALATO A SABINO ARANA GOIRI
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS